Aragón quiere que el gasto en I+D equivalga al 1,3% del PIB en 2020

El Gobierno de Aragón quiere que el gasto en I+D equivalga al 1,3% del PIB de la Comunidad en el año 2020. La Comunidad ha elaborado una estrategia de investigación e innovación para el período 2014-2020 y espera conseguir movilizar en este período fondos públicos y privados por valor de más de 2.000 millones de euros.

Zaragoza.- El Gobierno de Aragón ha elaborado la Estrategia Aragonesa de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente, que ahora se abre a la participación ciudadana. El documento estima que podrían movilizarse recursos en investigación e innovación por valor de más de 2.000 millones de euros en los próximos seis años y tiene como objetivo aumentar un 35% el gasto en estas áreas para conseguir que en 2020 el gasto equivalga al 1,3% del PIB. Todo ello con la premisa de que para entonces más del 55% de este gasto tenga origen privado.

Este documento es “una condición necesaria” para la llegada de fondos Feder y Feader entre 2014-2020 ya que Europa pide a los territorios para recibir los fondos que tengan definida “una estrategia de especialización donde ponga de manifiesto sus prioridades, sus sectores, los fondos y el compromiso del Gobierno de la región en enfocar todas las actuaciones hacia el sistema de innovación en sintonía con la estrategia europea”, tal y como ha explicado el consejero de Industria e Innovación, Arturo Aliaga.

El documento pretende mantener los centros de investigación, activar los mecanismos para contar con una mayor presencia de la investigación pública y privada en el mundo empresarial, concienciar a las compañías de la cooperación para hacer productos innovadores. También mantener los apoyos a los grupos de investigación y los institutos.

La estrategia define, entre otras, como prioridades la conectividad, la eficiencia en los recursos y el bienestar y la calidad. En materia de conectividad se incluyen actividades referentes a la logística y material de transporte, fabricación de vehículos a motor, carrocerías, remolques, semirremolques y ferrocarril, así como empresas proveedoras de componentes para todos ellos.

Por su parte, la prioridad en eficiencia en los recursos se centra en la energía y el agua, con oportunidades de desarrollo que pasan por el almacenamiento e integración de sistemas energéticos, el cierre de ciclos de agua, materiales y energía y los sistemas de información y monitorización de la gestión hidrológica.

Por último, la prioridad relacionada con el bienestar y la calidad de vida agrupa los sectores agroindustrial, del turismo y de salud. Las líneas estratégicas que se contemplan son el desarrollo de proyectos y servicios integrales para satisfacer las demandas de servicios de salud y asistenciales de una población dispersa y envejecida; nuevos productos, procesos y tecnologías en el ámbito agrario, alimentario y forestal; mejora de la cadena de valor de productos agroalimentarios basados en el origen y turismo a partir del patrimonio natural y cultural.

Junto con estas tres prioridades, la estrategia define un conjunto de tecnologías facilitadoras esenciales a fomentar, identificadas a partir de fortalezas y elementos diferenciadores detectados: nanotecnología, nuevos materiales, nuevas tecnologías de producción y tecnologías de la información y la comunicación.


Editorial: Un futuro innovador

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