Zaragoza.- La directora general de Energía y Minas, Marina Sevilla, ha defendido que a corto plazo no habrá fracking en la Comunidad y ha querido dejar claro que el Gobierno de Aragón no quiere ser pionero en la materia. Apuesta por esperar a una normativa específica comunitaria y por ver qué sucede en otros sitios de España.
Sevilla cree que el carbón tiene futuro en España y ha defendido la competitividad del sector en la Comunidad Autónoma. Ha abogado por la diversificación de las cuencas mineras y que la zona no tenga tanta dependencia de este recurso energético. Por ello, la DGA ha decidido lanzar ayudas que estimulen la puesta en marcha de nuevas industrias, especialmente pequeñas y medianas empresas.
Estima que hay un resurgir de la minería metálica. Cree que la demanda de China hace que explotaciones que antes no eran viables ahora lo sean, lo que permite generar empleo en la Comunidad.
Pregunta.- ¿Cómo está la situación del carbón actualmente?
Respuesta.- Creo que el sector del carbón tiene mucho futuro. Creo que la minería del carbón en España pasa necesariamente por el mantenimiento del sector en Aragón. Tenemos una minería muy competitiva e, indudablemente, si la térmica de Andorra se mantiene tenemos carbón para rato.
P.- ¿La minería en Mequinenza tiene futuro?
R.- La mina de Mequinenza depende extraordinariamente de que encuentre un nuevo cliente que compre el carbón. Es una minería asociada a la central de Escucha, que cerró sus puertas, y ahora estamos trabajando por ver que el carbón de Mequinenza puede quemarse sin riesgos en la térmica de Andorra. En eso estamos y depende de que Endesa concluya esas pruebas técnicas y que ese carbón pueda quemarse sin riesgos.
En Mequinenza quedan tajos en materia de restauración y desde el Gobierno de Aragón trabajamos para que se mantenga esa cuenca abierta. Sería una importante tristeza que se perdiera esa cuenca y trabajamos en ver que efectivamente, desde el punto de vista técnico, se puede quemar ese carbón.
Es algo que no depende ni del Gobierno central ni del de Aragón sino que depende de Carbonífera del Ebro y, especialmente, de que Endesa decida abrir sus puertas a ese carbón de la cuenca de Mequinenza.
P.- ¿Cuál es el objetivo de la convocatoria de ayudas a proyectos empresariales en las zonas mineras?
R.- El Gobierno de Aragón ha tomado la decisión y ha tenido el impulso decidido de seguir apostando por la diversificación económica de las cuencas mineras. ¿Qué ejes ha llevado a cabo? En primer lugar, intentar que esos proyectos que fueron seleccionados por la Mesa de la Minería y paralizados por el Gobierno anterior y el actual en Madrid puedan desarrollarse. Hablo de proyectos como el balneario de Ariño o el centro de día de Alcorisa.
Queremos también que las cuencas mineras sigan diversificándose y no sean tan dependientes del carbón. Eso precisamente es lo que busca la convocatoria en la que trabaja el Gobierno de Aragón relativa a sacar ayudas que estimulen la puesta en marcha de nuevas industrias, especialmente pequeñas y medianas empresas, en las cuencas mineras.
Trabajamos para dotar de fondos suficientes al Departamento para hacer que esta convocatoria invite a abrir negocios en las cuencas mineras.
P.- ¿Cómo está funcionando el proceso de liberación de terrenos mineros?
R.- Se ha hecho un notable esfuerzo en intentar que nuestro catastro minero, aquel que recoge todos los derechos existentes, sea un catastro vivo, que detrás de un derecho haya un promotor que quiera realmente ejercer la minería.
Antes teníamos un catastro minero donde había derechos que residían en personas o entidades que tenían el derecho pero no se ponía en valor y con el concurso hemos conseguido que el 6,5% del territorio que no estaba disponible para poder ejercer la minería, ahora lo esté.
A través del concurso, hemos conseguido que 33 nuevas iniciativas empresariales se estén tramitando para que se pongan en marcha actuaciones de investigación minera. Con este esfuerzo hemos logrado que sin poner nada en el Presupuesto hayamos hecho una política decidida de estímulo de la minería que ha implicado la creación o mantenimiento de más de 300 puestos de trabajo y que se dediquen más de 3 millones de euros en materia de investigación.
Estamos satisfechos por haber hecho esta decidida apuesta, que nos ha salido bien. Ése es el camino a seguir.
Minería metálica
P.- Hace un año vaticinaba el resurgir de la minería metálica, ¿se ha cumplido?
R.- Decía hace un año que estábamos trabajando por reabrir la mina de Ojos Negros y considero que el Gobierno central está tardando demasiado en tramitar un expediente que, a nuestro juicio, es sencillo y debería autorizarse ya.
Estimo que hay un resurgir en minería metálica porque ha sido uno de los recursos más solicitados en el concurso minero. Hay expectativas de reapertura de minas de hierro en Almohaja y en Ojos Negros e iniciativas empresariales para investigar yacimientos de plomo y zinc en Candasnos y Talamantes.
La demanda del gigante chino es extraordinaria y hace que explotaciones que no eran viables hace unos años ahora lo sean. Estamos tramitando nuevas autorizaciones de plomo, de plata en Alpartir o de cobre en Biel.
Hay explotaciones muy interesantes que a medio plazo creo que van a dar buenos resultados y van a generar empleo en la Comunidad.
Áridos
P.- ¿Qué situación vive el sector de los áridos?
R.- Siempre estamos con el carbón de crisis en crisis, pero hasta la fecha no podríamos afirmar que en los últimos años haya habido un descenso en el empleo. La bajada ha estado en la tónica de lo normal, de lo que pasa en otros sectores productivos. Sin embargo, en el sector de los áridos, que genera tanto empleo como el carbón, sí que es cierto que hay un decrecimiento del número de explotaciones activas.
Ellos mismos, en su proceso de análisis de cómo está el sector, han hablado de que la minería de los áridos tiene que tener un ajuste muy importante, incluso del 70%. Nosotros como Departamento de Industria e Innovación estamos muy cerca del sector, hemos resuelto expedientes y problemas históricos, sobre todo en el entorno de la ciudad de Zaragoza, e intentamos que las compañías, al menos, intenten reagrupar sus explotaciones, otorgando el derecho a paralizar aquellas que no son tan viables.
Tienen que apretar todavía mucho los dientes porque si no hay inversiones en obra pública o privada, el sector de los áridos se nos cae. Es un sector muy asociado a la construcción y está sufriendo las consecuencias de esta crisis.
Fracking
P.- ¿Habrá fracking en Aragón a corto plazo?
R.- A corto plazo no puede haberlo porque los procedimientos de investigación de hidrocarburos son a largo plazo. Aragón tiene concedidos permisos para investigar, que suelen tener una duración de seis años y conllevan investigaciones muy profundas, con mucha dedicación, mucho tiempo y mucha inversión.
Para que nos hagamos una idea. En los últimos años ninguno de los permisos de investigación otorgados ha sido fructífero y al final no se ha encontrado, hasta la fecha, ni gas, ni petróleo.
Si además hablamos de la complejidad que puede tener la realización de estas técnicas de fracturación no veo que a medio plazo se puedan desarrollar sondeos con esta técnica porque hace falta investigar. Primero hay que saber dónde puede haber; segundo, que haya el recurso; tercero, que esté en cantidad suficiente; y cuarto, en una calidad adecuada.
Es cierto que hay un boom y muchas peticiones, pero el Gobierno de Aragón tampoco quiere ser pionero en esta materia. Investigar hidrocarburos sí, pero no tenemos que ser pioneros en aplicar técnicas de fracturación hidráulica.
Vamos a ver qué pasa en el contexto europeo y en otros sitios de España y si hay normativa específica comunitaria. No hay que ser pioneros en esto, el recurso, si lo hay, estará ahí y es mejor que la técnica y la ciencia avancen.
P.- ¿Habrá más permisos de investigación para investigar hidrocarburos?
R.- Siempre los ha habido. No es ninguna novedad, ni nos podemos negar a que en Aragón se investigue la existencia de gas o petróleo. No lo ha hecho nadie en el mundo, ni lo hará nadie.
Nuestra dependencia energética como país es tan grande que, siendo uno de los países turísticos más importantes del mundo, todos los ingresos que llegan se van en comprar en gas y petróleo.
No podemos negar la investigación sobre la existencia de gas o petróleo, pero lo que sí podemos es ser prudentes y tener cautela en las técnicas que deberían aplicarse. Queremos que se haga con técnicas convencionales como las que se aplican en la minería.
