Zaragoza.- CHA critica el contenido del convenio firmado entre el ayuntamiento de Castelserás y el Gobierno de Aragón para la construcción de una depuradora de tipo EDAR.
Desde CHA se critican que “las condiciones leoninas del acuerdo por el que el Ayuntamiento solo adquiere obligaciones y se deja la construcción, elección del modelo, disposición y explotación en manos del Instituto Aragonés del Agua (IAI) y, por tanto, de las empresas privadas que considere. Además, la alcaldesa ha firmado un cheque en blanco, sin conocer ni los costes finales ni las fechas de ejecución”.
CHA tmabién ha recordado que no se está estudiando la posibilidad de otras alternativas, como las depuradoras verdes, mucho más económicas u otros modelos más baratos.
La construcción de una depuradora supone una inversión “desorbitada” para el municipio y que, los vecinos, se ven obligados a asumir un gasto que hipoteca los proyectos futuros. “Teniendo en cuenta esta realidad, lo lógico es que el pueblo pueda decidir qué modelo quiere y dónde” –ha señalado Francisco Espada, presidente del Ligallo del Bajo Aragón de CHA.
En estos momentos se están produciendo protestas en la zona ya que se pretende instalar a menos de 300 metros del municipio “abarata los costes al Gobierno de Aragón pero condena al municipio a soportar malos olores”, explica Espada. “En Mequinenza ocurrió algo parecido y al final se tuvieron que invertir 623.000 euros extra para solucionar el problema”.
Por último, se critica que este convenio no es único. Muchos municipios firmaron otros similares en 2009, los ayuntamientos asumieron unas condiciones desorbitadas y ahora tienen que hacer frente a unos gastos inasumibles.
