El Banco de Alimentos de Zaragoza repartió cuatro millones de kilos en 2018

El Banco de Alimentos de Zaragoza está de aniversario. Y es que hace 25 años que un grupo de hombres y mujeres detectaron las necesidades alimentarias que había entre la población desfavorecida y se lanzaron a recaudar excedentes de empresas. Aquel primer año, 1994, recogieron 90.000 kilos; el pasado 2018, han conseguido repartir hasta cuatro millones.

Ellos siempre dicen que "sería mejor que no existiéramos", como explica su presidente, José Ignacio Alfaro. Pero lo cierto es que sigue habiendo carencias y ellos siempre estarán ahí para suplirlas. Ellos y los otros 54 bancos de alimentos que existen en España acreditados por la Fundación Lealtad. En Aragón son 154 voluntarios fijos, en su mayoría jubilados o prejubilados, que no cobran un céntimo por su labor solidaria y que dedican dos días a la semana, de 9 a 13 horas, a ayudar a los demás.

"Somos una organización sin ánimo de lucro, apolítica y aconfesional y atendemos a todo el mundo, piense lo que piense, sin discriminación por etnia", relata Alfaro. Los peores años fueron los de la crisis. Concretamente, en 2012 y 2013, tuvieron que atender a 39.000 personas y más de 200 entidades; ahora, han bajado a 26.000 personas y 180 entidades, eso sí, han conseguido incrementar el número de toneladas que manejan año a año y cuyo valor asciende a cinco millones de euros.

Fondo de Ayuda a Desfavorecidos (FEAD)

También desde Europa se controlan las donaciones de alimentos a través del FEAD. En concreto, Aragón envía a Bruselas un 20% de lo que recauda y parece que las previsiones a futuro indican que las ayudas se podrían extender a ropa, calzado y productos de higiene para 2020.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Zaragoza presta sus instalaciones de Mercazaragoza al Banco de Alimentos, y también los mayoristas de fruta y verdura hacen entregas dos días a la semana. "Queremos agradecerles su ayuda, que supone el 10% de los 4 millones que maneja el Banco de Alimentos", apostilla el alcalde, Pedro Santisteve, "tenemos que estar concienciados de la necesidad de no desperdiciar y evitar la superabundancia".

Y del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), gestionado desde el Ministerio de Agricultura, también llegan frutas y verduras dos veces al mes. La delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, señala que "gracias a la coordinación entre las instituciones, las cosas fluyen y podemos llegar a este 25 aniversario". 

25 ANIVERSARIO

En la gala de esta mañana de viernes, el Banco quería mostrar su agradecimiento a todas las personas que colaboran en Aragón. Tanto el alcalde de Zaragoza como la delegada del Gobierno han asistido en calidad de partícipes de ese cambio que se está operando en la sociedad española, cada vez más solidaria. Prueba de ello, es que se recoge más cantidad.

Si bien el evento más sonado es la Gran Recogida, tres jornadas maratonianas que se celebraron en 2018 a finales de noviembre y donde se aportaron 450.000 de los 4 millones de kilos totales, a lo largo del año se realizan diversas campañas de recogida en colegios, hospitales, cuarteles y empresas. Y, por supuesto, también hay donaciones.

Los Bancos de Alimentos de España también son solidarios entre ellos mismos y, cuando hay excedente, se lo intercambian. Desde Aragón, por ejemplo, se exporta cebolla, porque la hay en abundancia. "Burgos tiene una fábrica de Campofrío y Leche Pascual y nos envía a nosotros productos que le sobran; Reus nos envía cereales de la fábrica de Kellogg’s; Alicante, tarta heladas, y todos los bancos les enviamos a Ceuta y Melilla, que no tienen absolutamente de nada", termina Alfaro.