Zaragoza.- Dos son las semanas consecutivas que acumula el Real Zaragoza en zona catastrófica, la de descenso a Segunda División "B". Las urgencias crecen en un conjunto, el aragonés, que visita este domingo una de las plazas más complicadas de la categoría de plata del fútbol español, reencontrándose con un "viejo" conocido: el Deportivo de La Coruña de Natxo González.
Un choque que sobre el papel parece tener un pronóstico claro a favor de los gallegos, terceros con exactamente el doble de puntos que los dirigidos por Lucas Alcaraz. Eso sí, la obligación maña es intentar dar la sorpresa en Riazor, campo que históricamente no se le da bien, porque de no ser así corre el riesgo de que comience a abrirse una brecha con las escuadras que pelean, como los blanquillos, por la salvación.
La gran novedad en la lista es la de Alberto Guitián, quien fue presentado este miércoles y ya está preparado para medirse al Deportivo si así lo desea Alcaraz. Al respecto, el entrenador ha explicado que "viene de jugar hace poco y está bien, sin problemas de lesiones este año", lo que le hace apuntar a la titularidad teniendo en cuenta que, además, Álex Muñoz sufre problemas físicos por determinar a falta de las pruebas médicas que se le realizarán.
Continuando con Guitián, Alcaraz ha afirmado que "es un jugador con unas características concretas que va a venir bien", recordando que "llega para suplir la baja de Grippo, que era un hombre muy importante en la parte de atrás y además es un chico que ha priorizado venir a Zaragoza sobre todas las cosas".
Respecto a la trascendencia del encuentro, el andaluz ha admitido que "cada partido que pasa y no ganas, el siguiente es más importante todavía", incidiendo en que no pueden "eludir la trascendencia de los resultados y de los partidos que vamos a disputar". Comenzando contra un Deportivo que es de los mejores locales y que Alcaraz ha comentado que es "un rival importante por rendimiento y clasificación".
