Zaragoza.- Cuando uno se presenta ante su afición debe dar lo mejor de sí mismo y ofrecer una imagen que ilusione a la parroquia local. Y el Tecnyconta Zaragoza cumplió de manera absoluta con todas las premisas, en un pabellón Príncipe Felipe que alardeaba satisfacción al término del triunfo, imponente, por 97-70 ante el Alba Berlin.
Seibutis fue la única ausencia del conjunto dirigido por Porfirio Fisac, pero poco o nada lo notaron los maños. El primer cuarto fue un vendaval ofensivo donde el Tecnyconta se mostró algo más acertado que su rival, especialmente Okoye, quien acaparó la mayoría de los elogios tras un encuentro en el que se marchó hasta los 19 puntos de anotación.
El 29-21 con el que finalizaba el primer cuarto fue neutralizado por los germanos, que le daban la vuelta al electrónico en lo que acabaría siendo un espejismo. Porque apareció el acierto desde fuera del propio Okoye y también de Berhanemeskel, dejando el luminoso al descanso en 51-43.
Fue el tercer cuarto el que abrió brecha de manera definitiva, sumando el Tecnyconta en prácticamente todos los ataques y apretando en defensa para que el Alba diera, con tiempo por delante, el choque por perdido.
Vendaval fue también el último cuarto, donde Justiz también se sumó a la fiesta con un gran tapón en un partido lastrado por las faltas. Tiempo hubo para que el canterano Lobaco tuviera minutos en el desenlace, en la guinda perfecta para un encuentro que finalizaba con 97-70. Y, lo mejor, con unas sensaciones notables de cara al estreno liguero en Vitoria.
