Zaragoza.- Jesús Alquézar es, desde hace un mes, el nuevo director de Zaragoza Activa. Su trayectoria profesional empezó relacionada con el mundo de la pedagogía. En los años 80 tomó las riendas de la dirección de la Universidad Popular, hasta principios de los 90, cuando comenzó su transformación hacia el sector del emprendimiento y la empleabilidad. Pasó así a participar en los servicios de empleo municipales, en concreto en el conocido como Imefez, hasta 2008.
Fue entonces cuando pasó a la Unidad de Fomento Empresarial hasta 2012, cuando dio el salto al mundo de la inserción sociolaboral y la empleabilidad, formando parte del programa Zaragoza Redistribuye. Ya en 2015 pasó a la Oficina de Empleo, Emprendimiento e Inclusión Social y su siguiente etapa acaba de comenzar encabezando Zaragoza Activa.
Para Alquézar, la innovación tiene que ir dirigida a "solucionar los problemas de los ciudadanos" y destaca el cambio en el perfil del emprendedor que acude a Zaragoza Activa. Ahora, dice, son emprendedores "nativos y vocacionales".
Pregunta.- ¿Cómo se sumergió en este proyecto y liderar la dirección de ZAC?
Respuesta.- Tampoco lo medité demasiado porque me parecía un proyecto atractivo. Después de una larga trayectoria profesional en este ámbito y sabiendo que asumir esta dirección no me impedía seguir gestionando los proyectos y trabajos que estábamos realizando, me pareció atractivo. No me costó mucho decidirme cuando la responsable de la Concejalía de Educación e Inclusión me propuso asumir la dirección.
P.- ¿Qué cree que puede aportarle como director?
R.- Fundamentalmente experiencia, en el sentido de proporcionarle solidez y ese momento de maduración que todo proyecto necesita. Es un proyecto que ha estado muy bien impulsado y ha tenido una fase de consolidación muy interesante en estos años y en estos años lo que yo le puedo aportar es soporte.
P.- ¿Cómo valora la dirección de Raúl Oliván? ¿Qué valoración hace de la trayectoria de Zaragoza Activa hasta ahora?
R.- Como decía, el proyecto ha estado bien dirigido. Creo que tiene un equipo técnico muy potente y ha tenido un impulso político importante, y la coherencia entre el impulso político y el trabajo técnico le ha generado una ventana de oportunidades impresionante a lo que es tener en la ciudad un espacio de emprendimiento dedicado a innovación social y ciudadana. Sin duda, el anterior director tiene el mérito de haber encauzado este proyecto.
P.- ¿Qué proyectos tiene para Zaragoza Activa?
R- En una primera fase estoy realizando una tarea de diagnóstico porque Zaragoza Activa tiene muchos proyectos diferentes que han aparecido durante el tiempo y por tanto tiene un grado de consolidación diferente. Aún así, un reto que me parece muy interesante es relanzar Zaragoza Activa Las Armas porque además está muy impregnado de mi forma de ver la innovación. Es decir, la innovación no puede ser algo etéreo, sino algo que contribuya decididamente a solucionar los problemas de los ciudadanos y esté relacionado con lo que ocurre en el territorio.
Desde este punto de vista, mi primer reto es relanzar la actividad de Zaragoza Activa Las Armas desde la perspectiva de utilizar todo aquello que los grupos de pensamiento del ThinkZAC Las Armas, que durante todo este tiempo ha estado funcionando, es trasladar muchas de esas conclusiones a lo que ocurre en el entorno.
Otro reto importante es el lanzamiento del Centro de Nuevas Economías o Centro de Economías Transformadoras, en cualquier caso, lo que se conoce como Casa del Director y que está próxima a La Azucarera. Depende de las obras que hay que hacer en el edificio, pero me gustaría que incluso este año si fuera posible, pudiéramos llegar a abrirlo.
También nos hemos presentado a una iniciativa europea que se llama Ubarct, a raíz de considerarse a La Colaboradora Buena Práctica Europea de Emprendedurismo, para que sea una de las mejores 27 prácticas que se van a replicar en toda Europa. En abril nos dirán si se nos concede el proyecto. La réplica inicial se llevaría a cabo en Italia y Polonia, y luego se está abriendo una segunda fase con más países. Se llevaría a siete ciudades a lo largo de los próximos tres años. Sería una réplica de La colaboradora a escala europea.
Balance de 2017
P.- ¿Qué datos puede ofrecernos de 2017, respecto al balance de la actividad?
R.- En las actividades de carácter permanente, hablamos de más de 500 actividades en la Plaza, la zona de Mass Media, La Colaboradora, El Semillero… De ellas, 350 serían actividades que tienen inscripciones y se puede hacer un seguimiento de su presencia. Hablamos de 5.400 personas inscritas en las 350 actividades. El resto son abiertas al público y no podemos hacer un recuento.
Por otra parte, la Red ZAC cuenta con más de 12.000 personas que hacen un seguimiento cotidiano. Además, en Made in Zaragoza hay 170 comercios en esta red de innovación comercial. El Semillero va por su novena edición, lo que supone unas 25 ideas nuevas al año que se ponen en circulación como posibles proyectos de futuro. Hemos tenido unos 30 viveristas en el Vivero de Empresas y hablaremos de unos 250 miembros en La Colaboradora, aunque he redondeado a la baja.
P.- Son unas cifras muy positivas…
R.- Las cifras son excelentes. Tengo que decir que pertenecen a la época anterior a llegar yo, pero son la constatación de que el proyecto ha ido creciendo con salud, pero la mayor parte de los proyectos internos que han nacido permanecen en el tiempo.
"Emprendedor de vocación y no de ocasión"
P.- ¿Qué perfil tiene el emprendedor de ahora? ¿Ha cambiado en los últimos años?
R.- En el caso de Zaragoza Activa es un emprendedor mucho más social, de menor base tecnológica que los que puede haber en otros viveros incluso municipales, como el CIEM o La Terminal. Iba a decir joven, pero te das cuenta de que la juventud es más de espíritu, porque de edad hay un poco de todo. No es un perfil muy universitario, aunque predomina en algún sector. En definitiva, creo que el eje del perfil es gente con ganas de comerse el mundo.
Creo que la burbuja que el emprendimiento pudo suponer en algún momento, por aquello que parecía que todo el mundo estaba llamado a emprender en esta vida, entre otras cosas porque para muchos no había mucha solución, es algo que se está reajustando. Cada vez más es más el porcentaje de emprendedores nativos y vocacionales. Nuestros emprendedores son cada día más emprendedores de vocación y menos de ocasión.
P.- Es cierto que la tendencia apunta a que cada vez son más los emprendedores maduros con proyectos madurados…
R.- Sí, yo diría que son emprendedores más serenos y menos arrebatados en su afán de emprender. Hay muchos que están en su segundo o tercer emprendimiento. Sí que es verdad que veo y hablo con muchas personas que están volviendo a cimentar sus nuevos proyectos en base a los aprendizajes que han realizado en los anteriores, y me parece un valor tremendo, que la cultura del aprendizaje no sea una cultura ocasional.
P.- ¿Siguen manteniendo las empresas que nacen en esta incubadora el mismo porcentaje de éxito a largo plazo?
R.- Tenemos que mejorar nuestras métricas. Los datos que tenemos son de 24 meses de funcionamiento. Si hablamos del Vivero de Emprendedores, contamos un 71% de supervivencia a los 24 meses. En El Semillero es de un 51%, pero hay que pensar que aquí vienen personas con la idea puesta, pasan con nosotros un proceso de formación de unos cuatro meses y durante ese periodo incluso hay gente que se da cuenta de que esto no es lo suyo, que el proyecto no es el adecuado, o que es imposible de sacar adelante con el plan de negocio.
Sin embargo, en La Colaboradora el porcentaje de éxito es tremendo. Yo todavía me pregunto si es el efecto de comunidad el que hace que el apoyo mutuo consolide unos resultados tan positivos, porque estamos por encima del 90% con toda seguridad, a los 24 meses.
"La Colaboradora tiene ingredientes perfectos para ser un éxito"
P.- La Colaboradora, el Vivero de Empresas, el Semillero, Made in Zaragoza… Son muchos los servicios que ofrece ZAC. ¿Cuál cree que es el que más acogida tiene?
R.- La Colaboradora es el que más repercusión exterior ha tenido. Tiene todos los ingredientes perfectos para ser un proyecto de éxito, por lo que supone crear comunidad de emprendedores, tener un banco de tiempo en el que las personas se dan apoyos y coformación, porque todas ponen cuatro horas al mes para formación del conjunto de los demás. Tiene muchas garantías de éxito. Es un proyecto premiado internacionalmente como Mejor Proyecto Eurocities 2016 de Cooperación Europea.
P.- ¿Cómo ve la cultura emprendedora en la ciudad?
R.- La cultura emprendedora ha ido a más y a mejor, y digo esto porque antes sólo iba a más, y en estos momentos la estamos encauzando entre todos. Hay emprendimientos que hay que retomar. Hay muchas personas que vienen de fuera y hay que pensar estrategias de emprendimiento para estos colectivos, incluyendo los refugiados. Muchas personas vienen de países con una gran cultura emprendedora. Tenemos que hacer un esfuerzo mayor en el emprendimiento social porque es un verdadero nicho de creación de empleo.
Emprender no es montar un negocio, es tener un proyecto de vida y ser capaz de trabajar en una escuela por proyectos y no sólo por asignaturas. Ahí sí que veo una evolución ente la cultura emprendedora de ocasión y la de vocación.
