Zaragoza.- Al Real Zaragoza y en concreto a Borja Iglesias les va a tocar estar pendientes durante un tiempo de la resolución del Comité de Competición. Este miércoles se ha reunido y ha decidido abrir un proceso de información reservada para dirimir si el gallego es sancionado por el gesto realizado en el Nou Estadi de Tarragona al celebrar su gol ante el Nàstic o, si bien, archiva el caso, según el periodista de Gol y experto en materias del comité, Isaac Fouto.
Por partes, La Liga decidía este martes hacer oficial la denuncia al ariete del Real Zaragoza con la siguiente justificación: "En el minuto 59 del partido, y tras anotar el jugador nº 9 del equipo visitante, Borja Iglesias, el segundo gol del encuentro, el propio jugador en la celebración del gol se dirige hacia la grada situada tras la portería, donde se ubican aficionados locales, sobre colocándose su dedo índice sobre sus labios, en señal de silencio".
Además, en dicho comunicado, afirmaba La Liga que el público había mantenido "un adecuado comportamiento durante el transcurso del encuentro". Según testigos presenciales, el delantero del Real Zaragoza fue insultado gravemente desde un sector de la grada desde el arranque del choque, bajo descalificaciones como "gordo" u otras refiriéndose de manera desagradable a su madre. Algo que el informador que visita todos los campos de Primera y Segunda División obvió en su escrito.
Un Borja Iglesias que, por si acaso, aseguraba al finalizar el encuentro precisamente ante las cámaras de Gol, entrevistado por Isaac Fouto, que si a alguien le había "parecido muy mal", les "pedía perdón".
Mientras, el Real Zaragoza, a última hora de este martes, emitía un comunicado oficial para mostrar "su estupor y desaprobación por la denuncia presentada por La Liga" a su jugador, manifestando que "el gesto nunca puede ser considerado un atentado contra la dignidad y el decoro deportivo, ni un acto contrario al buen orden deportivo, ni pretende ser tampoco una provocación al público".
Cabe recordar que la propia Liga se ha reunido este miércoles también para tratar un caso similar sucedido con Gerard Piqué en el terreno de juego del Espanyol, con idéntico gesto hacia un sector de la grada que profería insultos de manera constante. Y, al respecto, Competición ha decidido no sancionarle y archivar el caso. Si ocurrirá lo mismo o no con Borja Iglesias todavía no se sabe. En caso negativo para los intereses zaragocistas, el gallego se puede exponer a una sanción entre uno y doce partidos.
