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El Real Zaragoza acaba la jornada más cerca del descenso que del ascenso

El 3-0 negativo cosechado por el Real Zaragoza en su visita a Almería ha vuelto a complicar su situación en la tabla clasificatoria. Los de Natxo González finalizan la jornada número 15 a tres puntos de la zona de descenso y a seis ya de los playoffs de ascenso. El vitoriano reconoce que el equipo necesita cambios para competir.

Zaragoza.- El mes de noviembre está haciendo mucho daño al Real Zaragoza. El conjunto aragonés parece haber perdido el norte, no encontrando ni sensaciones ni resultados al margen del triunfo ante el Rayo Vallecano en el que, a los puntos, los madrileños fueron superiores pese al resultado. La gota que ha colmado el vaso de la preocupación cayó del cielo en Almería, con un doloroso 3-0 que ha encendido todas las alarmas.

Porque los maños no fueron capaces en ningún momento de controlar el encuentro frente a un Almería que a base de golazos destrozó el sistema defensivo de Natxo González. El mismo, aunque con algún nombre diferente, que ha hecho que el Real Zaragoza haya encajado la friolera de ocho goles en las tres últimas jornadas. Y que sea la quinta escuadra más goleada de la categoría.

La clasificación no invita al optimismo tras la disputa de la decimoquinta jornada en Segunda División, ya que los maños figuran a tres puntos de la zona de descenso y a seis ya de los playoffs de ascenso. Mientras, el ascenso directo queda a ocho puntos, con el Lugo como segundo clasificado, y el liderato ostentado por la Sociedad Deportiva Huesca a once.

Una situación que invita a Natxo González a pensar en la necesidad de cambios tanto en el sistema como en el uso de nombres. Es decir, que comiencen a aparecer aquellos nombres que hasta ahora están contando con una escasa cantidad de minutos, como es el caso de Papunashvili o Vinícius Araújo.

La plantilla guarda este lunes jornada de descansa regresar mañana a los entrenamientos, con la mente puesta en el choque del próximo sábado ante el Reus en La Romareda. Una prueba de fuego para el equipo y para el cuerpo técnico encabezado por Natxo González. Porque no ganar puede suponer que se desate la tormenta.