Zaragoza.- La aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña ha generado opiniones de todo tipo entre los grupos políticos aragoneses. Por un lado, las fuerzas constitucionalistas como PP, PAR y Ciudadanos se muestran a favor de esta medida del Gobierno central. Por otro, la oposición formada por Podemos, CHA e IU han calificado esta medida como una de las peores de la democracia.
El primero en defenderla ha sido el presidente del Partido Popular, Luis María Beamonte, quien ha destacado que esta medida "sirve para restablecer la legalidad, que es la mejor garantía para vivir en libertad". Además, ha señalado que "la situación en Cataluña es dura y difícil para todos, también para muchos aragoneses que siempre hemos tenido a Cataluña como una Comunidad hermana", al tiempo que resalta que "la fortaleza es sumar, ir juntos".
Un camino similar ha seguido el PAR. Su presidente y portavoz en las Cortes, Arturo Aliaga, ha instado a la Generalitat a "reconsiderar la situación para volver a la normalidad democrática y de convivencia, que es lo que interesa a todos".
Del mismo modo se ha manifestado la portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, quien espera que esta medida "sirva para recuperar la normalidad democrática e institucional". Al mismo tiempo, mantiene que su objetivo debe ser "convocar elecciones democráticas en Cataluña y se pongan urnas de verdad que permitan a los catalanes elegir en libertad y con total respeto a todos sus derechos".
La izquierda rechaza la medida
Por el contrario, Podemos, Chunta Aragonesista e IU se han mostrado contrarios a la aplicación del 155. La formación morada, en palabras del secretario general, Nacho Escartín, cree que "era el momento de dialogar pese a las amenazas unilaterales de Puigdemont", por lo que asevera que "Rajoy está imponiendo las peores medidas que se podrían traer ahora mismo, unas medidas duras, desproporcionadas y que suponen de facto derogar el autogobierno catalán".
En el mismo sentido, el presidente de CHA, José Luis Soro, ha afirmado que "esto no va a solucionar nada", sino que "va a agravar muchísimo la situación también en Aragón". "Entramos en una época de recentralización territorial que va a tener gravísimas consecuencias", ha comentado Soro. Además, culpa tanto a Rajoy como a Puigdemont de provocar esta situación.
Por último, desde Izquierda Unida, su portavoz Patricia Luquin, mantiene que esta decisión "lejos de intentar solventar un problema como el catalán, esto ahonda en la fractura y es el fracaso de la política", para lo que aboga por "recuperar la política".
