Zaragoza.- Alrededor de medio millar de vecinos de la comarca Andorra-Sierra de Arcos han respondido al llamamiento hecho por el Ayuntamiento de Andorra. Convencidos de que es el momento de estar más unidos que nunca han recorrido el municipio para clamar por una solución que permita la supervivencia de las cuencas mineras.
A las 20.30 horas de la tarde de este jueves la plaza del Regallo y sus calles aledañas se han llenado de habitantes de la zona, representantes políticos, sindicales y de organizaciones sociales para dejar patente la importancia de que siga funcionando la Central Térmica de Andorra.
Una reclamación que se remonta al año 2010, pero que desde hace pocas semanas ha tomado un cariz trascendental, después de que se haya hecho público que la junta de accionistas de Enel, empresa que la gestiona, haya decidido finalizar definitivamente su actividad. Eso sí, también se ha realizado pocos días después de que el Gobierno central haya asegurado estar trabajando en la elaboración de un decreto que podría dar una última esperanza a la continuidad de la Central.
Desde un balcón de la plaza, se ha lectura de un manifiesto que cifra en 4.000 los empleos directos e indirectos que se verían afectados por el fin de la instalación. Aseguran que la pérdida de los 200 puestos de la Central generaría un efecto dominó, porque de ella dependen otros 300 puestos de las minas de la comarca, pero también el de los de eventuales de épocas de revisión y actualización de la CTA, y también muchos derivados del sector servicio como talleres, transporte, comercio, hostelería, centros educativos o sanitarios.
Minutos antes de que diera comienzo el acto, la alcaldesa de Andorra, Sofía Ciércoles, se congratula del número de vecinos que han acudido a la llamada a reclamar su futuro. Por otro lado, el alcalde de Ariño, Joaquín Noé, que también es minero, asegura que hay indicios palpables de que la actividad minera en la zona está repuntando por que la Central “está a pleno rendimiento”, lo que demuestra que el carbón “sigue siendo necesario dentro del mix energético”.
Un mensaje de unidad han querido mandar desde los sindicatos. Por su parte, el secretario comarcal de CCAA, Antonio Giménez, se ha mostrado “animado” porque “parece ser que el Gobierno se está moviendo, pero no nos podemos relajar y tienen que ver que en Andorra hay una incertidumbre que no podemos aguantar más”. Su homólogo de UGT, Felipe Ginés, ha defendido que es el momento de “apoyar porque esta comarca lo necesita ahora más que nunca.
Peticiones del manifiesto
Según reza el manifiesto, los andorranos pretenden "exigir que Endesa, realice las inversiones de adaptación de la Central Térmica de Andorra a las exigencias medioambientales de la Unión Europea" para "alargar el período de vida de la Central en cumplimiento de los compromisos contraídos históricamente con los trabajadores".
Asimismo, requieren al Gobierno estatal que "actúe con la máxima urgencia para recuperar el control público del sector energético en España por su relevancia social, económica y estratégica", así como "redactar, presentar y aprobar un Plan Energético Nacional que sitúe en el año 2050 el horizonte del 100 % de Energías renovables y autosuficientes", además de un "Plan de Desarrollo Económico en Andorra y las Comarcas Mineras que sea capaz de atraer nuevos proyectos empresariales".
Por último, lamentan que los planes anteriores de industrialización no han dado los frutos suficientes "para corregir el efecto monopolizador del sector minero-eléctrico". "El gran reto para el nuevo siglo lo representa la diversificación económica de la zona, si se quiere evitar que la comarca sufra el mismo proceso que ha caracterizado a gran parte de la provincia: la despoblación", han concluido.
