Más jóvenes que nunca

En torno al 20% de la población zaragozana supera los 65 años. Sin embargo, no todos ellos tienen las mismas necesidades. Por ello, el Ayuntamiento ha elaborado un estudio sobre los "nuevos mayores"; es decir, las personas que acaban de formar parte de este colectivo, para mejorar la oferta de proyectos de envejecimiento activo.

Zaragoza.- Las expectativas de una persona de unos 65 años se construyen desde la idea de contar con más de 20 años por delante, muchos de ellos en un estado de salud muy bueno y desde una situación económica que les permiten planificar y desarrollar proyectos personales. Son personas activas, cuidan su salud y hacen deporte, y por ello ven los centros de convivencia como espacios orientados a un sector de edad mayor.

El Ayuntamiento de Zaragoza cuenta con una treintena de centros de convivencia creados en los años 80. Unas instalaciones que han ido evolucionando con el paso del tiempo. En Zaragoza hay más de 125.000 ciudadanos de más de 65 años, lo que supone en torno al 20% de la población. De ellos, casi la mitad son socios de algunos de los socios de convivencia.

La imagen que tienen las personas de entre 60 y 65 años de estos centros son las de "clubes de jubilados", donde se juega a las cartas y se hace gimnasia de mantenimiento, explica el responsable de la Oficina Técnica del Mayor, Javier Viela. Esta oficina ha elaborado un informe sobre estos "nuevos mayores", tal y como les denominan.

Viela afirma que a los 65 años se accede a la jubilación "con una actitud activa de participación". Simplemente, ha dicho, "tienen más tiempo libre y se sienten perfectamente capaces de seguir haciendo cosas y sienten que tienen tiempo para aportar todo aquellos que pueden seguir aportando por su experiencia de vida o sus propias profesiones".

Diagnóstico participativo

El Ayuntamiento se planteó preguntar al colectivo de personas mayores de 65 años sobre la imagen y la opinión que tienen sobre los centros de mayores, así como las mejoras proponían para poner en marcha y dar respuesta a sus demandas. Para este estudio se ha seleccionado los grupos de población.

"Se trata de un diagnóstico participativo, mediante grupos focales y entrevistas a líderes sociales", subraya Viela. En este estudio han participado personas mayores que no han ido nunca a un centro, otras que son asiduas, también ha participado personal municipal, de talleres, así como las juntas de representantes de estos centros. Todo con el objetivo de mejorar la oferta de proyectos de envejecimiento activo, ser capaz de mejorarlo y adaptarlo a las nuevas demandas que llegan.

En Zaragoza hay más de 125.000 ciudadanos de más de 65 años
En Zaragoza hay más de 125.000 ciudadanos de más de 65 años

Como conclusión general, Viela resalta un "cambio importante" en la actitud y los intereses de las personas nuevas que se jubilan. Y es que, tal y como destaca, "prefieren ayudar a la comunidad que recibir servicios". En ese sentido, argumenta que "se ve claramente cómo sus intereses están más por ayudar y seguir participando activamente en la sociedad, tienen una actitud mucho más positiva y les interesa que se les reconozca el papel social que tienen en el colectivo".

Una vez realizadas las encuestas, se ha comprobado que las personas mayores que no son socias de los centros de convivencia plantean la apertura de los centros al entorno, el voluntariado, un modelo de ciudad para todas las edades, que los centros tengan más espacios de estar y para relacionarse, más autonomía y empoderamiento personal, promocionar y reconocer su contribución social, más actividades culturales vinculadas a los recursos de la ciudad, participación intergeneracional, entre otros aspectos.

En esta misma línea, Viela hace hincapié en que uno de los temas que más interés despierta son recursos y actividades que puedan dar soporte a sus propios planes personales. "Estas personas recién jubiladas tienen su capacidad para organizar su tiempo libre, pero sí es adecuado tener recursos para facilitarles informaciones de viajes".

Además, plantean actividades de cultura, tecnología, temas de actualidad y buscan "promover una imagen positiva en los medios de comunicación evitando todo tipo de estereotipos negativo que a veces se han generado en torno al colectivo de los mayores".

Diferentes generaciones

Con todo ello, desde la Oficina Técnica del Mayor ha detectado la necesidad de asumir la convivencia de, al menos, dos generaciones de personas mayores. Por ello, quieren buscar una franja de intereses y necesidades comunes sin desatender a aquellos de más edad, al tiempo que se incorporan los nuevos mayores.

La Oficina Técnica del Mayor ha elaborado un informe sobre los
La Oficina Técnica del Mayor ha elaborado un informe sobre los "nuevos mayores"

Se trata de dar respuesta a sus intereses y ofreciendo vías de participación que permitan rentabilizar personal y socialmente la aportación de una vida de experiencia, ya que sin duda se cuenta actualmente con un importante colectivo, que se incrementa progresivamente, de personas mayores que se sienten más jóvenes que nunca.

Una vez elaborado el diagnóstico de la situación, y sabiendo las demandas del colectivo, hay un equipo en la Oficina Técnica del Mayor que planteará qué proyectos habría que poner en marcha o cómo habría que modificar los que ya existen para dar respuesta a las demandas. Esto afecta a muchos niveles de actuación, desde la forma de intervención de los técnicos municipales hasta el diseño, organización, imagen o servicios de los centros. Ahora se está valorando y traduciendo a la realidad para dar respuesta a este estudio.