Partido lamentable del Real Zaragoza que le devuelve al último puesto (4-0)

Desastre del Real Zaragoza ante el Espanyol, en un partido en el que cayó goleado por 4-0, sin opciones de puntuar en ningún momento. La falta de actitud y el desacierto maño deja de nuevo al equipo como farolillo rojo de la Liga BBVA. Poco tardó el Espanyol en hacer sangre en la defensa zaragocista y el resultado se convierte en justo para un equipo sin actitud, sin ganas y sin espíritu.

Zaragoza.- Importante partido el que disputaba el Real Zaragoza en Cornellá-El Prat ante un Espanyol, calificado como intratable en casa por Javier Aguirre, con siete victorias y tan sólo una derrota ante el F.C.Barcelona. Problemas para el conjunto del mexicano con la baja de Ponzio por sanción y de Contini por problemas durante la semana. Sus sustitutos, Edmilson y Lanzaro, además de la entrada de Lafita por Bertolo.

Poco tardó el Espanyol en hacer sangre en la defensa zaragocista. Un centro de Didac era rematado completamente solo por Osvaldo. Incomprensible que un ariete de estas prestaciones se encuentre sin marca en el minuto ocho de partido, colocando el 1-0 en el marcador para delirio de la afición espanyolista.

Los siguientes minutos fueron los de la incertidumbre de un Real Zaragoza perdido, fuera de sitio y sin ningún tipo de movimiento con peligro en el ataque. Pochettino movería banquillo tras la lesión de Javi Márquez, dando entrada al ex zaragocista Sergio García. Los catalanes tocaban sin aparente oposición la pelota y Osvaldo se relamía, consciente de que iba a tener más oportunidades de inflar su cuenta goleadora ante la endeble defensa maña.

A punto estuvo Luis García de sentenciar tras un gran pase de Sergio García, en el enésimo desajuste defensivo de la zaga zaragocista. A estas alturas de la primera parte, el partido del Real Zaragoza opositaba para ser lo más horrible que se había visto en un terreno de juego. Mientras, a Pochettino le crecían los enanos. Osvaldo en una jugada fortuita con Lanzaro se lesionaba y tenía que abandonar el rectángulo de juego en detrimento del canterazo Álvaro Vázquez.

Pero para acabar con el sufrimiento espanyolista está Carlos Diogo. Una vez más, el uruguayo hacía una entrada absurda, a destiempo, derribando a Callejón dentro del área. Luis García no perdonaba y ponía el 2-0 en el marcador, en el minuto 30, sin apenas haber tenido que esforzarse. Y la cosa no acababa aquí. Sin tiempo para pestañear, el Real Zaragoza perdía un nuevo balón en el centro del campo y el balón le caía al recién incorporado Álvaro Vázquez, que colocaba el balón en la escuadra ante la atónita mirada de Leo Franco.

Un 3-0 justo a un equipo sin actitud, sin ganas y sin espíritu, al que le podían caer varios más de seguir con esa lamentable pasividad. Lo intentaría Sinama-Pongolle, en el primer disparo a puerta con algo de peligro en el minuto 42, pero su disparo se marcharía directo al segundo anfiteatro. No sería la última oportunidad de una primera parte digna de borrar de la memoria para los aficionados zaragocistas. Leo Franco se tuvo que estirar y sacar una buena mano ante un centro-chut de Verdú que se colaba dentro.

Segunda parte

Aguirre intentó cambiar la dinámica en la segunda parte con la entrada de Bertolo y Pintér por Jorge López y Edmilson. Nada mejoró. El tiempo transcurría con mucha más pena que gloria por Cornellá, con los 22 futbolistas deseosos de escuchar el pitido final y no realizar esfuerzos en vano. La mejor oportunidad la tuvo Paredes con un centro que Kameni sacó prácticamente de dentro, en una segunda parte sin ritmo, aburrida hasta la extenuación.

El Espanyol no necesitó hacer nada más. Álvaro Vázquez falló a puerta vacía el enésimo regalo de Jarosik. No falló Sergio García, completando el circo y el resultado, con el 4-0 final en una incomprensible asistencia de Adam Pintér. El marcador deja al equipo muy tocado, de nuevo colista, empatado con Sporting y Almería y a dos puntos del Levante a falta de lo que haga ante el Valencia. Patético.