Zaragoza.- Comienzo dominante de los hombres de Mariano Ortega en la pista del Frigoríficos Morrazo. El conjunto naranja, sabedor de la importancia del triunfo, salió con todo al pabellón gallego. En la mente de los jugadores del conjunto aragonés, un único objetivo: la victoria.
Con el paso de los minutos el conjunto local despertó de su letargo inicial. Con suma facilidad, el Frigoríficos Morrazo se deshizo de la presión y, en dos ataques esporádicos, remontó el resultado inicial de 1-2 para plantarse con un 4-3 esperanzador.
Cuando se rozaba el minuto 10 del encuentro, Maqueda puso el empate en el luminoso en una ocasión franca al contraataque. Una de las grandes novedades durante el primer tramo del choque fue la ausencia de Larson. El jugador sueco del CAI no participó en los primeros minutos de un partido de vital importancia para los intereses del conjunto aragonés.
Arrhenius y Toño Cartón se erigieron como dos alternativas en el ataque con dos tantos consecutivos que pusieron el marcador en un interesante 5 a 6. El partido, hasta el momento, no tenía un dueño claro. Sin embargo, el juego de los naranjas apuntaba más maneras que el despliegue físico de los gallegos.
Oslak fue, sin lugar a dudas, el mejor jugador de los locales. Su aportación ofensiva adquirió tintes, por momentos, demoledores para los hombres de Mariano Ortega.
A decir verdad, la nota predominante durante toda la primera mitad fue la igualdad de ambos conjuntos. Los locales se mostraron muy sólidos en las transiciones defensa-ataque. Por su parte, el CAI fue un equipo timorato por momentos. El resultado al descanso de 12 a 12 fue un fiel reflejo del juego desplegado por ambos conjuntos. Oslak fue el mejor de los locales. Por los naranjas, Arrhenius y Malumbres tiraron del carro.
Segundo tiempo
Tras la reanudación, los hombres del Frigoríficos Morrazo salieron muy enchufados. En apenas un minuto consiguieron hacerse con un parcial de 2-0. Una ventaja muy cómoda para un equipo muy arropado desde la grada.
Los tiradores del CAI estaban desaparecidos en combate. Así, como viene siendo habitual en los últimos encuentros, la figura de los extremos y de los pivotes resultó fundamental. Cartón, haciendo gala de lucha y brega, se echó el equipo a la espalda y recortó distancias en el marcador con dos goles de mérito.
Los pupilos de Mariano Ortega salieron algo dormidos en defensa. El juego al contraataque de los gallegos resultó un arma mortal para el CAI. Cuando se rozaba el ecuador del segundo tiempo la diferencia a favor del Morrazos era de tres tantos. El marcador de 18 a 15 parecía una losa difícil de levantar para los zaragozanos.
Sin embargo, el CAI tiró de pundonor para darle la vuelta al marcador haciendo gala de fuerza y compañerismo. En apenas cinco minutos los jugadores del cuadro naranja alcanzaron un resultado de 21 a 22. Un sorprendente parcial de 1 a 6 para los aragoneses parecía algo impensable a comienzos del segundo tiempo.
Robert Arrhenius, el mejor del partido, tiró del equipo hasta el final de un choque muy igualado. Al final del partido 24 a 26. Victoria muy sufrida del CAI Balonmano Aragón en un encuentro que se presuponía más fácil para los aragoneses.
