Novallas.- Las obras de construcción de la planta depuradora que dará servicio a las poblaciones de Novallas y Malón, en la comarca de Tarazona y el Moncayo, avanzan a buen ritmo. Tanto es así, que podrían finalizar en el plazo de cinco meses, con lo que su entrada en funcionamiento se producirá a principios del año 2009.
En declaraciones a Aragón Press, el alcalde de Novallas comenta que “en estos momentos la obra está bastante avanzada”. “Los vasos de la depuradora están prácticamente finalizados y quedan pendientes los colectores tanto a Malón como a Novallas”, apunta Jesús Fernández. También se construyen los edificios o naves que acogerán las instalaciones de suministros tales como electricidad.
Así las cosas, el primer edil prevé que “en cuatro meses o cinco meses, la obra podría estar finalizada, por lo que entraría en funcionamiento la depuradora”. Para entonces, la inversión habrá ascendido a 2,6 millones de euros, una cantidad que “es imposible de asumir por parte de los dos municipios”, reconoce Fernández.
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Imagen de las obras, con Novallas al fondo |
Por ello, es un proyecto que financia el Gobierno de Aragón, a través del Plan Especial de Depuración de Aguas Residuales. La EDAR de Novallas y Malón dará servicio a los casi dos mil habitantes que suman estas dos localidades zaragozanas. Permitirá depurar las aguas residuales no sólo del casco urbano, sino también del recién construido polígono industrial de Novallas, que actualmente van a parar al río Queiles.
La Dirección General del Agua compró los terrenos –tanto municipales como particulares- por los que transcurrirán sendos colectores que conectarán la planta depuradora con Novallas y Malón, una operación que contó con el apoyo de los dos ayuntamientos.
