Los más movidos del aula

En Aragón existen casi 6.000 escolares con trastornos de déficit de atención e hiperactividad, lo que representa el 5% de la población escolar en la Comunidad Autónoma. Estos niños son los más movidos del aula y para que consigan prestar atención, los profesores tienen que llevar a cabo estrategias como "la técnica de la tortuga".

Zaragoza.- Un niño molesto, que no presta atención, se despista, es impulsivo y pide levantarse continuamente. Así es como definen a un niño con un trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH) los que no lo conocen. Recién inaugurado el curso escolar 2008-2009 en Aragón existen casi 6.000 escolares que lo poseen, lo que representa un 5% de la población escolar de la Comunidad Autónoma.

El error diagnóstico en este tipo de casos hace que estos niños no se desarrollen en todas sus facultades, ya que un niño con TDAH no tiene porqué ser menos inteligente, sino que le cuesta más centrar su atención y al querer recompensas rápidas su autoestima baja y también sus calificaciones escolares. La mejor edad para el diagnóstico es entre los cinco y los siete años.

Los escolares con este trastorno son, a menudo, tildados de malos estudiantes o "patitos feos" que interrumpen las clases, molestan, etc...; pero esto puede cambiar si los profesores establecen estrategias en torno a ellos mediante conversaciones y permitiéndoles moverse para que presten atención, poniéndoles en primera fila y utilizando el método de objetivo-recompensa.

Otra de las técnicas que usan los profesores con estos niños es la "técnica de la tortuga", que consiste en que el niño se esconda para que pueda desconectar, piense, reflexione y luego actúe. Lo más común en las aulas, hoy en día, es "la silla de pensar", afirma Asunción Tutor, de la Asociación Aragonesa del Déficit de Atención con o sin Hiperactividad (Aateda).

El patio del colegio, la parte que más gusta a los escolares, es uno de los lugares donde los niños con TDAH sacan a relucir su dificultad para adaptarse al grupo, pues no aceptan las normas. Además, estos se llevan mejor con niños menores que ellos o adultos.

Por otro lado, los niños con TDAH son muy creativos y destacan bastante en deporte, arte y música, a lo cual hay que sacarle partido.

Los niños olvidados con TDA

Asunción Tutor es responsable de la Asociación Aragonesa del Trastorno del déficit de atención con o sin hiperactividad

Los escolares que sólo tienen déficit de atención necesitan otro tipo de trato que los que también acusan hiperactividad. Estos suelen ser los "niños olvidados", pasan desapercibidos y no comprenden lo que ven. Aunque es un porcentaje menor que el de TDAH, a ellos se le añade el problema de comprensión, algo que es de origen genético y hereditario, en un 80% de los casos, y en un 20% por problemas en el embarazo, en el parto o adicciones de los padres. Además, se les diagnostica más tarde, entre los 10 y los 12 años.

Tratamientos y entrenamientos

El tratamiento del TDAH puede ser farmacológico pero también mediante entrenamiento. En la sede de la Asociación Aragonesa del Déficit de Atención con o sin Hiperactividad (AATEDA), situada en la calle Poeta Blas de Otero, número dos (653 952 560), se dedican a atender a los padres con niños que tienen este trastorno y a los mismos niños.

Los entrenamientos que se hacen en la sede aragonesa tienen como objetivo reforzar la atención, el área del lenguaje, las habilidades sociales para que el niño sepa cómo enfrentarse a situaciones cotidianas en las que les aparezca la impulsividad.

Otro de los aspectos a corregir por estos ejercicios es lo manipulables que pueden llegar a ser con el fin de que se les acepte en un grupo. Este trastorno no requiere ningún tratamiento psicológico.

Michael Phelps

El arte es una de las materias que mejor realizan los niños con TDAH

El nadador de los Estados Unidos Michael Phelp que consiguió ocho medallas en los Juegos Olímpicos de Pekín, fue el más aplaudido hace varios meses.

A Phelps se le diagnosticó un Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) un poco tarde con nueve años, aunque acabó demostrando a su profesora que había cometido un error al comentarle a su madre que jamás sería capaz de llegar a lograr grandes éxitos por su "incapacidad para concentrarse".

El ejemplo de Phelps que era un niño cuando recurrió a la natación para tratar de mitigar los síntomas de la hiperactividad que sufría de pequeño, es algo que aporta más claridad sobre este trastorno y que desmitifica el TDAH.