Huesca.- Coincidiendo prácticamente con el 50 aniversario del nacimiento de Barbie, que tendrá lugar en marzo del próximo año, Lanaja contará con un museo dedicado en exclusiva a esta muñeca. Tendrá más de 700 barbies expuestas en una superficie de más de 80 metros cuadrados. El sueño de toda niña hecho realidad.
El museo, que espera abrir sus puertas el próximo mes de octubre, se ubica en la antigua diezma, edificio de siglo XVI que debe su nombre por ser el lugar donde se guardaba el diezmo, impuesto que gravaba el 10 por ciento de la cosecha.
Hace tiempo que sus paredes dejaron de cobijar los granos de trigo. Pero nadie podía imaginar que en un futuro pudiera llegar a albergar un museo de la Barbie.
Iniciativa privada
Surgido de una iniciativa privada, el museo es único en España por su organización y la variedad de elementos que componen la exposición. La idea surgió hace un par de años, cuando la promotora del museo y presidenta de la Asociación Cultural “La Diezma Lanaja”, Pilar Marín Yaseli, pensó en hacer algo para que “la gente fuera a visitar este pueblo maravilloso”.
 |
|
Kent también es guardia civil |
No lo dudó dos veces. Sabía que tenía que ofrecer algo diferente y por eso descartó la posibilidad de hacer un museo etnológico. Entonces, un vecino del pueblo, en una de tantas conversaciones, le comentó “Pilar, ya tienes un edificio para tus muñecas”.
A partir de ahí, esta mujer de 62 años se puso manos a la obra. Ha pasado horas cosiendo y creando algunos de los elementos que se pueden ver en el museo, como el barco y las redes que recrean el fondo del mar o el tótem del campamento indio.
Pero, para llegar a tener más de 700 muñecas han tenido que pasar muchos años. Todo comenzó, recuerda Pilar, cuando sus hijas se fueron haciendo mayores y dejaron de jugar con muñecas y como “la Barbie me encantaba, decidí continuar. Por eso, cada vez que iba a Estados Unidos o Londres, me compraba una Barbie y, poco a poco, he ido aumentado la colección”.
Y en cada mercado, en cada rastrillo que Pilar visitaba, sólo buscaba algo que pudiera servirle a sus muñecas. Ahora, ya están diseñando su propia página web, pero por el momento sólo está disponible una dirección de correo eléctronico: [email protected]
Hadas, indios y brujas
Organizadas por temáticas, la exposición comienza con un campamento indio, continúa con el fondo del mar y las hadas, pasando por una recreación de Halloween, y finaliza con Cher, Marilyn Monroe o las películas “Grease” o “Lo que el viento se llevó”. Eso sí, matiza Marín Yaseli, también se puede ver “un kent danzante o un kent Guardia Civil porque he querido recrear cosas que están en Lanaja, como la carrera del hombre contra el caballo o la procesión de Semana Santa”. Incluso el kent danzante tiene el escudo de la localidad bordado y sus zapatillas son una réplica exacta en miniatura de las que utilizan los danzantes de Lanaja.
 |
|
El museo cuenta con 700 piezas |
También hay una maleta del año 1968 que es la pieza más antigua de la exposición y que fue donada al museo por una estadounidense.
El Museo de la Barbie no ha dejado nada al azar. Así, el antiguo corral se ha convertido en una zona de juegos para los niños que visiten la exposición. Además, Pilar ha adquirido un coche de los que se utilizan en los campos de golf para hacer publicidad del museo.
Peticiones americanas
Pilar se puso en contacto con la filial española de Mattel para explicarle su proyecto. “Les comenté que iba a abrir un museo de la Barbie y me dijeron que estaban muy contentos”. El museo, que será gratuito, se podrá visitar de viernes a domingo, aunque abrirá sus puertas fuera de este horario a grupos organizados.
Por el momento, ya ha recibido peticiones desde Estados Unidos para ir a visitar el museo. “Allí, la cultura de las barbies es un mundo aparte. Hacen hasta convenciones, y se reúnen en hoteles. Tienen más de 200.000 muñecas barbies”, explica Pilar.
Pilar, zaragozana de nacimiento, no duda en manifestar todo el cariño que siente por Lanaja, pueblo al que fue a parar tras un viaje que realizó a Estados Unidos. “Mi hija estaba estudiando arquitectura en Miami, y fuimos a comer a un restaurante español. Le pregunte al dueño que de dónde era y me dijo que en el mundo hay tres ciudades importantes: Lanaja, Paris y Londres. Y yo le contesté, a París he ido muchas veces, en Londres he estado muchos veranos, pero Lanaja no lo conozco. Entonces vine, y me gustó mucho”.
Ahora, su esfuerzo se ve recompensado, pero ella se mantiene en que “con 62 años, todavía se pueden seguir teniendo ilusiones”.
