Zaragoza.- Se acerca el mes de septiembre y todo lo que ello conlleva en cuanto a los gastos para las familias de la vuelta al colegio de los más pequeños. Sin embargo, en Aragón este coste es uno de los más bajos de España, gracias en buena parte a que los libros son gratuitos.
Así lo recoge en un estudio la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes (FUCI), que ha tomado como referencia cerca de doscientos colegios del territorio nacional, para conocer cuál es el impacto económico de la vuelta al colegio para las familias con hijos en edad escolar.
Se han analizado 196 colegios públicos, concertados y privados españoles en los que se ha tenido en cuenta el coste de los uniformes, la matrícula, los libros, el material, la comida y el transporte
De media, las familias españolas deberán afrontar un coste medio de 825 euros por hijo, si bien los gastos varían mucho en función del centro elegido. Así en el caso de un centro público el inicio de las clases supondrá 528 euros, 783 si estudia en uno concertado y 1.164 euros si opta por un colegio privado. En Aragón, los precios son bastante inferiores: 400 euros en un centro público; 598 en un colegio concertado y 1.100 en enseñanza privada.
La FUCI ha constatado, de esta forma, que el hecho de estudiar en una autonomía u otra también puede disparar estos costes. Comunidades como Madrid, Cataluña y Valencia son las más caras. En el otro extremo, se encuentra Aragón (699 euros de media), a tan sólo un euro de Galicia (688 euros), donde el inicio del curso escolar es más barato para las familias. Castilla-La Mancha empata con la Comunidad aragonesa con 699 euros.
Según esta organización, este hecho “no es casual”, sino que se debe a los diferentes sistemas de financiación de la Educación. De las 17 comunidades autónomas sólo cuatro (Castilla-La Mancha, Aragón, Galicia y La Rioja) tienen libros gratuitos durante todos los cursos de la enseñanza obligatoria, lo cual se refleja en el menor coste que deben afrontar los padres. Estos territorios utilizan el sistema de préstamo de libros, de forma que puedan ser utilizados por otros alumnos en años académicos sucesivos, siendo renovados cada cuatro años, salvo los libros correspondientes al primer ciclo de Primaria que se renuevan anualmente.
Otras comunidades que optan por la reutilización de los libros son Canarias y Andalucía, aunque no en todos los niveles de educación obligatoria. Cataluña, País Vasco y Extremadura son las regiones más atrasadas en este sistema.
Entretanto, otras autonomías como Cantabria, Valencia, Murcia, Asturias y Castilla y León tienen el sistema de cheque-libro que consiste en la entrega de un vale para la adquisición de los libros de texto que las familias pueden canjear en el establecimiento de su elección, pasando a ser los libros propiedad del alumno. Estas ayudas varían según cada comunidad y son, a juicio de FUCI, insuficientes ya que el importe no cubre el coste total de los libros de texto y además no hay ayudas para todos los cursos.
Por último, Madrid, Baleares y Navarra ofrecen subvenciones para la adquisición de libros de texto y material didáctico para todos los niveles obligatorios de enseñanza, otorgando un trato favorable a las familias numerosas, con rentas bajas o discapacitados.
La FUCI reclama gratitud
Tras lo anteriormente expuesto, FUCI considera imprescindible la gratuidad de los libros de texto en todas las comunidades autónomas para evitar las desigualdades que se dan en la actualidad según el sistema utilizado en cada región y conseguir así el coste cero para los padres.
Asimismo, la FUCI ha lanzado una serie de recomendaciones a las familias con hijos en edad escolar. La federación ha recordado que las becas del Ministerio de Educación para la adquisición de libros de texto y material didáctico y buscar en los ayuntamientos los lugares más económicos para las actividades extraescolares.
Además, aconseja evitar acudir a créditos rápidos y escalonar las compras, ya que no todo el material es necesario desde el primer día. También ha aconsejado prescindir de las marcas en papelería, lo que puede suponer un ahorro del 30%, y aprovechar los descuentos que permite la normativa en libros de texto de Primaria y Secundaria.
