Zaragoza.- “Hemos subrayado el hecho de que el agua es un derecho social y queremos que sea así en todo el mundo”, ha comentado el comisario del Pabellón de Bélgica, Alfons Boesmans, “por eso, en cooperación al desarrollo hemos previsto recursos para que en el mundo la gente tenga acceso a agua potable”.
El Pabellón de Bélgica en la Expo, de unos 1.400 m2 divididos en dos plantas, recrea el clima belga y reconstruye el ciclo natural del agua en Bélgica. A la entrada, una alfombra de sphagnum une un cielo nuboso encuadrado por dos magníficas fotografías de Christine Felten y Veronique Massinger. La puesta en escena transmite en doce minutos el clima belga de los doce meses del año. Tras el mostrador de la entrada, se proyecta un vídeo con los mapas de los dos radares meteorológicos del período simulado. Los visitantes pueden relajarse y descansar en unos sillones de agua.
Alrededor de esta escena, las paredes del pabellón presentan la cuestión del agua en Bélgica. Hay cuatro temas. El primero es que el agua es un derecho social en Bélgica desde hace mucho tiempo. El segundo, que para garantizar este derecho, hay que sensibilizar a la población sobre el uso sostenible del agua. En tercer lugar, la investigación científica y las nuevas tecnologías tienen que ayudar a proteger, purificar y reutilizar el agua. Por último, el derecho al agua sana es un derecho de toda la humanidad y el gobierno belga considera esto como una prioridad de su política de cooperación al desarrollo.
El comisario del Pabellón de Bélgica, Alfons Boesmans, ha comenzado la presentación del Día Nacional de Bélgica en la Expo dando la “enhorabuena a los campeones” por la Eurocopa. “Bélgica no tenía un equipo de bastante nivel para participar, así que ayer apoyábamos al equipo de España”, ha comentado Boesmans.
“Bélgica es un país muy denso, con mucha gente que vive en una superficie no muy grande y tenemos que hacer que los recursos de agua -subterránea y de los ríos- se protejan y se usen de forma sostenible”, ha explicado Boesmans.
“El hombre que escribe sobre el agua”
Diversos esquemas del pabellón ilustran el ciclo completo del agua, desde la captación en lugares mágicos-grutas, cavernas, antiguas canteras… hasta el saneamiento de las aguas residuales mediante el tratamiento de aguas y la gestión de las redes de distribución, que cruzan las fronteras de las tres regiones de Bélgica.
En la parte posterior de la instalación central, los visitantes se sorprenden por una atmósfera de cueva. El agua de las precipitaciones, filtrada a través del sphagnum, gotea en una alberca sobre el suelo. La atmósfera misteriosa se acentúa con la extraña presencia de la escultura “El hombre que escribe sobre el agua”, siete baños en bronce, obra maestra de Jan Fabre, en la que el artista utiliza su propia imagen completamente vestido, zambullido en uno de los baños. Al acercarse a la obra, los visitantes tendrán la sensación de caminar sobre el agua.
La gastronomía belga está presente en su bar con chocolates, crepes y bebidas de frutas. El café-restaurante tiene 20 variedades diferentes de cerveza, tapas belgas, un restaurante a la carta y un menú del día a 15 euros. “Yo creo que en el ámbito de la Expo es bastante económico”, ha dicho Boesmans, que también ha recomendado las patatas fritas y los mejillones.
“Nuestro pabellón es bastante polivalente”, ha afirmado Boesmans, “tenemos nuestra oferta gastronómica y tenemos también exposiciones que cambian cada diez días”. Durante toda la Expo están programadas numerosas exposiciones de artistas y grupos musicales belgas.
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El Pabellón de Bélgica muestra numerosas obras de arte |
El Día Nacional de Bélgica en la Expo
El 3 de julio Bélgica celebrará su Día Nacional en la Expo. El príncipe heredero Felipe de Bélgica inaugurará oficialmente el pabellón ese día y la exposición “De Amberes a Madrid”. También asistirán el presidente del senado belga, Armand De Decker; el vicepresidente del gobierno belga, Didier Reynders, y el ministro de Finanzas y el ministro de Iniciativa Empresarial y Simplificación de la Administración, Vincent van Quickenborne.
Después de los actos protocolarios, la cantante Jo Lemaire dará un concierto en la Sala 2008 del Palacio de Congresos con canciones en español, francés y neerlandés. Además, grupos folclóricos belgas actuarán alrededor del pabellón, como Les Pilles o los zanqueros De Steltenlopers. Habrá demostraciones de encaje de bolillos por cortesía de la escuela de encaje belga “Artefil” y música de jazz por “The New Orleáns Train Jazz Band”.
Para terminar el Día Nacional de Bélgica en la Expo, habrá un concierto con entrada libre para el público en el gran auditorio del Palacio de Congresos. Se interpretarán las piezas “The Wider World of Water”, obra contemporánea del compositor flamenco Frank Nuyts para piano y voz, y “Water celebration”, espectáculo musical de la compositora Maria Palatine, basado en textos de Neruda, Tirtiaux, Rilke, Palatine y Petrella, con coro, soprano, tenor, aspista, percusionistas, saxofonista y pianista.
"De Amberes a Madrid"
Ése mismo día, el príncipe Felipe de Bélgica inaugurará una exposición en la sala polivalente del pabellón llamada “De Amberes a Madrid” (abierta al público del 27 de junio al 10 de julio), sobre la historia de la Fundación Carlos de Amberes y la de los maestros tapiceros Vandergoten y Stuyck, que tejieron una serie de tapices cuyos cartones fueron obra de Goya. Las piezas expuestas proceden del Museo del Prado, del Patrimonio Nacional, del Instituto de Valencia e Don Juan, de la familia Stuyck y de la propia Fundación Carlos de Amberes.
Con motivo de esta muestra, el pabellón ha editado un libro en colaboración con la Fundación Carlos de Amberes, “De Amberes a Madrid. La obra de Carlos de Amberes y los tapiceros Vandergoten-Stuyck”, que está a la venta en la tienda del pabellón.
“Esta exposición es muy importante porque subraya los lazos entre España y Bélgica, pero habrá otras” Además el agua es esencial para la preparación de las telas y los tintes de los tapices, según ha explicado Bernardo García, comisario de esta muestra. García ha comentado que “los tapices han estado siempre muy presentas en las colecciones españolas ya desde la época de los Reyes Católicos, y puede que España sea el país que tiene más tapices flamencos”.
