Zaragoza se paraliza

Parece que se han puesto de acuerdo. Durante el último mes, los trabajadores de varios sectores han salido a la calle y han convocado huelgas para protestar por sus condiciones laborales. Aunque cada uno con sus pancartas, todos reclaman mejorar su calidad de vida, en unos momentos de crisis y aprovechando la celebración de la Expo.

Zaragoza.- Pasan tiempos revueltos para el mundo laboral de la provincia de Zaragoza. No se sabe si motivados por la cercanía de la celebración de la Expo o por la crisis económica que aprieta los bolsillos, los trabajadores de varios sectores han salido a la calle en las últimas semanas para reivindicar mejoras salariales y laborales.

Hay de todo. Desde policías, bomberos, conductores hasta empleados de Pompas Fúnebres, pasando por el sector de la limpieza. A éste último es al que más se oye, y no porque sean más reivindicativos que los demás, sino porque son tres: los referentes a los centros sanitarios, los de edificios y locales, y los del Ayuntamiento de Zaragoza.

Todos ellos reclaman a sus patronales que mejoren la calidad del trabajo, incluyendo una subida salarial. El secretario de Servicios de CCOO, Alejandro Gastón, ha explicado que los trabajadores del sector de la limpieza cobran unos salarios mínimos –algunos apenas llegan a los 700 euros-, por lo que “su petición de ascender el salario a 14.000 euros brutos anuales, en tres años, es perfectamente comprensible”.

También solicitan una reducción de jornada y que las horas extras que se realizan, “y que además son más de las que marca el convenio, sean compensadas con días de libranza”

Sin embargo, las negociaciones con las asociaciones empresariales están rotas porque no están dispuestas a garantizar estas condiciones. Ante esta situación, los sindicatos no descartan llevar a cabo una huelga indefinida a partir de la primera semana de junio.

Los que sí están en huelga indefinida son los trabajadores de la limpieza de centros sanitarios como medida de protesta ante la falta de negociación del convenio colectivo y después de varias reuniones con la patronal. Los sindicatos convocantes, UGT y CC.OO, ya denunciaron hace dos semanas la intención de las patronales del sector de recortar los derechos consolidados de este colectivo. Por ello, los 1.200 trabajadores de Centros Sanitarios no realizarán sus tareas de limpieza, a partir del 11 de junio.

Mientras tanto, los representantes sindicales de Pompas Fúnebres se reunirán el próximo día 4 de junio en el Servicio de Arbitraje y Mediación Aragonés (SAMA) para tratar de buscar una solución. Durante el mes de mayo, llevaron a cabo un calendario de paros en la jornada laboral que finalizaron confiando que la patronal se decidiera a negociar el convenio, aunque los sindicatos dudan de que lo hagan a los niveles que reivindican.

Entre las peticiones de los empleados, destaca la regulación del sector, ya que “Aragón es una de las pocas Comunidades Autónomas en la que no lo está”, ha señalado el secretario de Servicios de UGT, Estebán Lauroba, quien ha agregado que “esta situación ha provocado que haya muy poca unificación”.

“Reivindicamos un convenio que fije un salario concreto para todos y unas jornadas que permitan la conciliación de la vida laboral y familiar”, ha apuntado.

El eterno conflicto de Tuzsa

La Exposición Universal de 2008 ha hecho estragos en la empresa Tuzsa que se ha visto obligada a sentarse a la mesa con el Comité de Empresa, en varias ocasiones para discutir sobre las vacaciones de verano. Aunque el conflicto comenzó en diciembre del 2007, con la realización de paros, todavía continúa. Después de llegar a un acuerdo con la empresa y con el Ayuntamiento, a principios de años, los trabajadores se quejan ahora de que no se está cumpliendo el convenio firmado.

Los trabajadores de Tuzsa han convocado paros los fines de semana de junio

El presidente del Comité de Empresa, Javier Anadón, ha asegurado que dicho acuerdo contemplaba una reducción de jornada, y sin embargo “el mes pasado se hicieron más de 6.000 horas extraordinarias”. Entre los incumplimientos también figura, según Anadón, los cuadros de marchas para garantizar una buena frecuencia.

“La realidad es que cuatro meses después no se ha realizado porque el estudio ni se ha comenzado a hacer”, ha lamentado Anadón quien ha agregado que “tanto la compañía como el Ayuntamiento no han cumplido y nos están dando largas”.

Ante esta situación, el sindicato mayoritario y al que pertenece el presidente del Comité de Empresa ha convocado paros para los fines de semana de junio, incluido el de la inauguración de la Expo, de 5 a 8 de la mañana, de 20 a 23 horas y 00.30 a 3.30 horas. De todas formas, los trabajadores confían en que tanto como TUZSA como el Ayuntamiento cumplan con lo pactado en el convenio, y han asegurado que si así se hiciera, antes del 7 de junio, desconvocarían los paros.

Éste es uno de los conflictos laborales que más repercute en la sociedad y los conductores de Tuzsa lo saben. Por ello, han convocado los paros en fin de semana para que afecte “lo menos posible a los ciudadanos” y han reclamado a Servicios Sociales del Ayuntamiento una autorización para que “los trabajadores no tengan la obligación de cobrar el billete a los usuarios”, ha explicado Anadón.

La Policía Local se une a las protestas

Por otro lado, pero en la misma línea de reivindicación, los policías locales han salido a la calle varias veces durante las últimas semanas para pedir al Ayuntamiento la reclasificación laboral.

Uno de los miembros del sindicato CSL CIPOL, Tomás García, ha indicado que la Policía Local, debido a las funciones que realiza, “no debería pertenecer al último grupo de la Administración pública”. Esta es la razón por la que, “hemos reclamado al Ayuntamiento de la ciudad una reclasificación pero ha hecho oídos sordos”.

Por su parte, el Consistorio sostiene que esta reclasificación, que ya existe en otras Comunidades Autónomas, tiene que esperar a que se apruebe la Ley autonómica de coordinación policial, competencia del Gobierno de Aragón. Sin embargo, Tomás García ha señalado que el ayuntamiento “sí que puede llevar a cabo esta reclasificación, sólo hace falta interés”.

Entre los actos reivindicativos que han llevado a cabo, figura una larga manifestación que secundaron unos 300 agentes y que recorrió Zaragoza desde la calle Domingo Miral hasta la plaza del Portillo.

Ese mismo día, otra manifestación, la de la limpieza de edificios y locales, llenaba el paseo de Independencia. Los dos colectivos se volvieron a ver el día 30 en la plaza del Pilar, pero cada uno con sus pancartas. Esta coincidencia refleja que muchos de los trabajadores aragoneses no están contentos con sus condiciones laborales, pero no en vano, confían llegar a un acuerdo con las patronales.