Huesca.-“Sinfonía audiovisual” del oscense Carlos Saura es el principal reclamo del Pabellón de Aragón durante la Exposición Internacional. Una proyección de quince minutos que recorre los diferentes paisajes del territorio aragonés al ritmo de la música de Roque Baños. “Las imágenes se proyectarán en la primera planta del edificio, sobre ocho pantallas de doce metros”, ha explicado la directora gerente del Pabellón de Aragón en la Exposición Internacional de Zaragoza, Sara Alcázar.
Las tres provincias aragonesas se encuentran representadas en la misma medida, no obstante el Pabellón aragonés albergará varias piezas del patrimonio histórico-artístico oscense en la segunda planta. “La Virgen de Iguacel, el capitel historiado de la Catedral de Jaca o la pintura El héroe del Ebro son alguna de las piezas expositivas”, ha asegurado Alcázar. Los paisajes y costumbres de Huesca también estarán presentes dentro de las 275 fotografías de José Verón Gormaz.
Paralelamente al contenido expositivo, la Sociedad Pabellón Aragón ha desarrollado una serie de actividades culturales distribuidas en tres grandes bloques: animaciones para las filas, espectáculos temáticos y la celebración del día de las comarcas. “La Orquestina de Fabirol, Biella Nuei o el Paloteao de Boltaña son las propuestas oscenses que acogerá el pabellón”, ha explicado Alcázar.
En esta misma línea, hay que destacar tres jornadas en el pabellón, el Día de las Comarcas, el Día de las Comunidades Aragonesas en el Exterior y el Día de Aragón. Este último se celebrará el 22 de junio con un acto institucional precedido de una gala de danza de la compañía de Víctor Ullate, un concierto de Santiago Auserón y la actuación de un grupo de jotas formado por los campeones de cante y baile del Certamen Oficial de Jota Aragonesa.
El objetivo de la programación se centra en dar a conocer la Comunidad aragonesa y “reflejar su identidad desde la histórica relación que mantiene con el agua”.
Un edificio sostenible
La apuesta arquitectónica de los arquitectos aragoneses Olano y Mendo confluye a la perfección con el contenido de la programación Expo. “Se trata de un edificio que evoca la forma típica de la cesta de mimbre aragonesa”, ha explicado la directora general de Administración Local, Lourdes Rubio. La planta baja, situada al aire libre, se ha diseñado como un palenque en el que se podrá disfrutar de las diferentes propuestas culturales pese a que la entrada del visitante se efectuará por la segunda planta. La terraza estará reservada a actos protocolarios. No obstante, el visitante podrá acceder por la noche a degustar un cóctel mientras los hinchables, que emulan la huerta aragonesa, se iluminarán.
El Pabellón de Aragón “atrapará” al visitante durante la Expo. Sus peculiaridades constructivas lo convierten en un edificio sostenible, “medioambientalmente responsable”, ha asegurado Rubio. No en vano, en su construcción se han utilizado técnicas destinadas al ahorro energético, consiguiendo, “un mayor aprovechamiento de la luz natural y la concepción de un microclima en su interior”, ha concluido Rubio.
