Zaragoza.- Las Cortes de Aragón han reiterado su oposición al trasvase al aprobar una proposición no de ley planteada por el PAR. Sin embargo, esta vez se ha añadido también la oposición a “la transferencia de aguas de la cuenca del Ebro”, término que aparece en el programa electoral del Partido Popular a los comicios del 9 de marzo. La proposición ha tenido el apoyo de todos los grupos salvo del PP, que se ha abstenido argumentando que “está recogido en el Estatuto de Autonomía y el Partido Popular se ha pronunciado reiteradamente con el Estatuto de Autonomía”, según ha expresado su diputado Antonio Suárez.
El diputado del PAR Javier Allué ha repetido que “en Aragón no sobra agua, faltan inversiones” refiriéndose a la falta de cumplimiento de las obras del Pacto del Agua. Allué ha advertido de que “la amenaza del trasvase sigue, por algunos más que por otros, y las obras de regulación no avanzan”. Además, se ha mostrado seguro de que cuando se cumplan esas obras “se demostrará que no sobra agua”.
Una enmienda presentada por el Partido Socialista ha añadido el término “transferencia de aguas”, aunque su diputado Jesús Miguel Franco ha insistido en que son términos sinónimos. De hecho, ha asegurado que “nadie tiene ninguna duda de que si el PP gana las elecciones su única política hidráulica será el trasvase del Ebro”.
Chunta Aragonesista e Izquierda Unida han apoyado la proposición, aunque ambas formaciones han puesto de relieve las declaraciones del vicepresidente Biel en Valencia dejando la puerta abierta a un posible trasvase. Adolfo Barrena, por parte de IU, ha mantenido que esta iniciativa se realiza “para lavar su conciencia por las declaraciones de Biel”. Por eso ha recordado que su formación siempre ha estado en contra del trasvase, que ya lo dijo en el Estatuto y lo dice “aquí y en Valencia”. “Nos oponemos al trasvase porque el río tiene que terminar en el mar”, ha razonado el líder de izquierdas.
Por su parte, Bizén Fuster ha coincidido con Barrena en resaltar que “este tema ya lo hemos votado reiteradamente”. Además, ha preguntado por qué el PAR votó en contra de una propuesta de CHA que incluía un punto vinculante para paralizar siempre un trasvase.
Antonio Suárez ha expuesto que la postura del PP es que “sólo si sobra agua, una vez ejecutadas las obras de las cuencas naturales, ésas son las aguas que se deben aprovechar”. Además, ha destacado que su formación incluye el compromiso de llevar adelante las obras del Pacto del Agua y ha señalado a Javier Allué que “plantean estas obras cuando gobiernan con el partido que no las está impulsando desde el Gobierno de la nación”.
Otros puntos de la proposición
La proposición no de ley planteada por el Partido Aragonés recogía también otros dos puntos tendentes a conseguir “el máximo autogobierno que permite la Constitución” y “el máximo nivel de inversión del Estado al que da derecho el Estatuto de Autonomía”. El primero de esos aspectos ha sido aceptado por los todos los grupos con una enmienda formal del PSOE, aunque los tres partidos de la oposición se han quejado de que se trata de un aspecto ya recogido en el Estatuto, por lo que no introducía nada nuevo.
En el caso de la inversión del Estado en la Comunidad, sin embargo, sí se han producido cambios significativos ya que el texto final insta al Ejecutivo aragonés a “conseguir la compensación por la deuda acumulada, mermas tributarias... y adoptar los mecanismos de corrección de la tradicional falta de los Presupuestos del Estado mediante transferencia a Aragón de las partidas que queden sin ejecutar”.
Para Javier Allué de este modo se reclamara la deuda histórica que para el Grupo Parlamentario del PAR el Estado mantiene con Aragón. Izquierda Unida, por su lado, ha asegurado que no se producen grandes diferencias respecto a lo que establece el Estatuto pero ha apoyado la proposición. Al contrario que el Partido Popular que ha usado ese razonamiento para abstenerse y Antonio Suárez ha asegurado que su grupo no va a participar “de este paripé”.
