El Rey espera que Expo 2008 muestre “un creciente compromiso en materia medioambiental”

Zaragoza y la Expo 2008 han estado presentes en el mensaje de Navidad de Don Juan Carlos I. El Rey ha hecho hincapié en el desarrollo sostenible y en la necesidad de ser respetuosos con el medio ambiente desde la unidad. Asimismo, ha expresado su deseo de que la Muestra refleje “un creciente compromiso en materia medioambiental".

Zaragoza.- “La celebración en 2008 de la Exposición Internacional de Zaragoza, dedicada al agua, debe permitirnos mostrar un creciente compromiso en materia medioambiental”. Lo dijo Don Juan Carlos I durante su tradicional mensaje navideño de la pasada Nochebuena, en el que quiso hacer hincapié en la importancia de proteger el medio ambiente.

“Un mejor futuro -señaló el Monarca- pasa, asimismo, por ejercer las responsabilidades y aprovechar las oportunidades para un desarrollo sostenible, respetuoso con el medio ambiente, con nuestros paisajes y riquezas naturales”.

El Rey pidió en repetidas ocasiones unidad para lograr un futuro mejor y superar los problemas del país. También cuando se refirió al tema de la Muestra Internacional que inaugurará Zaragoza el próximo 14 de junio: “No es un asunto que se limite a una legislatura. Requiere el acuerdo de todas las fuerzas políticas y el empuje de la sociedad en su conjunto”. Y añadió: “Apliquemos nuestros mejores esfuerzos a promover y apoyar los intereses de España en el mundo, con la fortaleza y credibilidad de una acción exterior ampliamente consensuada”.

La referencia a la Expo 2008 de Zaragoza fue el único comentario concreto del mensaje que Don Juan Carlos hizo de todo el territorio español. Sin embargo, sí repasó muchas de las situaciones vividas en España y que, incluso, han puesto a la Monarquía en un incomodo lugar. “Además de agradecer las numerosas muestras de afecto personal e institucional hacia la Corona, esta noche quiero reafirmar mi profundo y permanente compromiso de servicio y de entrega a España y a todos los españoles”, subrayó.

Solidaridad constitucional

El Rey comenzó su discurso resaltando el papel de la Constitución y el grado de modernización logrado en los últimos treinta años de democracia: “Es mucho lo que de forma solidaria hemos conseguido y más lo que aún podemos lograr. Esa capacidad de superación, ese dinamismo, es lo que distingue a la España de hoy. La España cuyo patrimonio común y diversidad aseguran nuestra Constitución”.

La “unidad y diversidad” del país son, a juicio del Jefe del Estado, “conceptos que nos definen y que, debidamente integrados en el marco constitucional que nos hemos dado, nos han permitido y nos permiten progresar como gran Nación”.

Don Juan Carlos reclamó “de nuevo a nuestros partidos políticos mayores esfuerzos para alcanzar el necesario consenso en los grandes temas de Estado” señalando la labor de la clase política por lograr una España “más justa, integradora y solidaria”: “Ésa es la grandeza de la política, entendida como servicio al conjunto de los ciudadanos. Ésa es la grandeza de quienes son elegidos para ejercerla y saben practicarla con amplitud de miras”.

Terrorismo y problemas sociales

También pidió unidad contra el terrorismo, que definió como “un inaceptable ataque a nuestros derechos y libertades”. “Necesitamos cuanto antes una cultura de unidad -insistió el Rey- que haga efectivo el compromiso de todos los demócratas para acabar definitivamente con el terrorismo”.

El acceso a la vivienda, los bajos salarios, la droga, los accidentes de tráfico o la violencia machista fueron otros de los temas sociales que el Jefe del Estado quiso incluir en su mensaje navideño. Don Juan Carlos pidió a las distintas Administraciones que redoblen “esfuerzos para atender las carencias de muchas personas” y se refirió a los malos tratos diciendo que “nos duelen e indignan profundamente, y nos denigran como sociedad”.

Relaciones internacionales

Hispanoamérica, Europa y los países mediterráneos centraron también parte del discurso de Nochebuena. El Rey señaló que la integración europea es “pieza esencial de nuestra propia modernización” y reafirmó “nuestros sentimientos de hermandad con todos los países y pueblos iberoamericanos. Para subrayarles de corazón, nuestra cercanía, nuestra admiración y respeto hacia sus respectivas y sólidas identidades y, sobre todo, nuestra apuesta solidaria con su futuro”.

El trigésimo aniversario de la Constitución y el futuro de España centraron la última parte del mensaje navideño. Su Majestad destacó el “variado patrimonio histórico, artístico y lingüístico” del país y confesó su “plena confianza en nuestra capacidad para seguir edificando un país moderno, unido y diverso, justo y solidario, con mayor bienestar para todos”.

“Trabajemos con entrega y generosidad, sin egoísmos -puntualizó el Jefe del Estado-. Pensando en lo que cada uno con su esfuerzo puede aportar al servicio de toda la sociedad. Conscientes del valor de la unidad para seguir progresando”. Y finalizó insistiendo en el anhelo y compromiso que debe unirnos, una vez más, a todos: “el bien de España y de los españoles”.


Mensaje de Navidad de Don Juan Carlos I

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