Zaragoza.- El vicepresidente del Gobierno de Aragón, José Ángel Biel, ha mostrado su total disconformidad ante los planteamientos que el Gobierno central tiene respecto al Estatuto de Autonomía. Biel ha instado a los aragoneses a “sublevarse, aunque sea en un sentido ético o moral”. “Hay que transmitir a Madrid que no estamos dispuestos a permitir que se le tenga tan poco respeto al Estatuto”, ha manifestado Biel.
El vicepresidente considera que es una falta de respeto total a este Estatuto, “que ha sido el mejor porque ha salido del Parlamento autonómico con más consenso que ninguno, con cuatro grupos a favor, mientras que sólo uno se abstuvo”. “Lo que no es de recibo es que las enmiendas sean consensuadas sólo entre PP y PSOE”, ha continuado. Y ha recalcado que el presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, “dijo que el consenso de Aragón se tenía que mantener”.
“Hemos padecido en Aragón muchos acuerdos de los partidos nacionales”, ha afirmado Biel, a quien le gustaría que “se pusieran de acuerdo en temas que afecten a la nación, y es una pena porque no se ponen de acuerdo en temas fundamentales para el Estado”. El vicepresidente se ha lamentado porque “siempre se ponen de acuerdo en temas que perjudican a los aragoneses”.
Estas palabras han sido expresadas en la apertura de la exposición Aquaria, acto en el que también ha tenido un emotivo discurso el presidente de la Diputación de Zaragoza, Javier Lambán. Éste ha alabado la acción de Aragón, como agente que ha desterrado la palabra “trasvase” como una opción de futuro. “Tratándola con rigor, la Nueva Cultura del Agua es aquí vieja”, ha expresado Lambán, “lo que es nuevo es la aplicación de doctrinarismos radicales e intransigentes en la administración del agua que han podido hacer mucho daño al desarrollo del territorio, si no fuera por el diálogo marcado por el Gobierno de Aragón”.
El presidente de la Diputación ha recordado las acciones del ex presidente Hipólito Gómez de las Roces cuando, hace dos décadas, se propuso un primer trasvase del Ebro. “Gracias a Aragón y a su aportación, cuestiones como la unidad de cuenca parecen haberse asentado en la cultura hegemónica en lo que al agua se refiere”, ha concluido.
